La dieta mediterránea es un modo rico y saludable de alimentarse, está basada en la alimentación que llevan a cabo los países mediterráneos, especialmente: España, Portugal, Francia, Italia y Grecia.
Las características principales de esta dieta son el consumo de alimentos naturales como los vegetales, frutas, cereales, legumbres y aceite de oliva como grasa principal.
Esta dieta reduce el consumo de hidratos de carbono y carnes y aumenta los vegetales y las grasas monoinsaturadas.
La pirámide de la dieta mediterránea dice que se debe tomar una o dos raciones por comida de pan, arroz, pasta u otros cereales, preferentemente integrales. Las verduras deberán ser dos raciones en la comida y en la cena y una de ellas debe ser cruda. Se debe tomar entre 1.5 y 2 litros de agua al día. Y se debe reducir el consumo de carnes rojas.
Esta dieta tiene numerosos beneficios para la salud:
- Previene la diabetes tipo 2: ya que es rica en fibra, y reduce el consumo de azúcares.
- Previene enfermedades del corazón: ya que recomienda el consumo de una copa de vino al día y está demostrado que este reduce los problemas de corazón; además de reducir el consumo de carnes rojas y la comida procesada.
- Reduce el riesgo de Alzheimer: ya que mejora el colesterol y el nivel de azúcar, estos factores reducen el riesgo de padecer alzheimer o demencia.
- Incrementa la longevidad: ya que reduce las enfermedades del corazón y el cáncer.
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