La OMS define la nutrición como la ingesta de alimentos en relación con las necesidades dietéticas del organismo.
Según esta definición podemos establecer una estrecha relación entre una dieta equilibrada y ejercicio diario moderado. Una persona que lleve a cabo estas dos pautas en su vida diaria tendrá una buena nutrición, factor esencial para conservar la salud.
Por el contrario, una persona que no se alimenta de la manera adecuada y lleva una vida sedentaria tiene más riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, entre otras, y su sistema inmune está menos desarrollado. Por lo tanto, lo que nosotros comemos día a día influye en nuestra salud, al igual que el ejercicio que realizamos.
Mucha gente no le da importancia a lo que come pensando que con un poco de ejercicio puede solucionar el exceso de grasas consumidas diariamente o, por el contrario, hay gente que lleva unos hábitos alimenticios saludables pero no hace ejercicio. Lo ideal sería poner en una balanza el ejercicio y los alimentos ingeridos y que esta balanza esté equilibrada.
Algunos beneficios de una dieta saludable son: prevención de enfermedades, peso corporal adecuado, suministro de energía y sensación de bienestar general.
Para entender el concepto de hábitos alimentarios vamos a proporcionar una breve definición. Son los hábitos que se adquieren a lo largo de la vida e influyen en nuestra alimentación. Llevar una dieta equilibrada, variada (alimentos de todos los grupos y en cantidades suficientes para cubrir las necesidades energéticas y nutritivas) y suficiente es clave para estar sanos.
Estos hábitos alimenticios están relacionados con enfermedades como la obesidad o la diabetes que se explicarán más adelante.
Fuente: http://cecu.es/publicaciones/habitos_alimentarios.pdf; http://www.kelloggs.es/es_ES/manual-de-nutricion.html; http://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs394/es/
No hay comentarios:
Publicar un comentario